Soy
el viento del sur
y giro en espiral hacia el norte,
mediterráneo de por medio
caminando sobre las aguas.
Desde El Aaiún, pasando por Tetuán,
hasta la ciudad de València,
aire cálido de otoño,
aire que no empuja veleros,
ni provoca grandes olas.
Traigo conmigo caracolas,
fauna exótica e historia,
mar limpia y clara
donde se reflejan albatros y pescadores.
Desde El Aaiún traigo conmigo
el aroma de las especias,
frutos secos, dátiles,
confusión de los sentidos.
Camino sobre las aguas,
a mi paso enareno
paisajes, ciudades y gente,
traigo el cáliz de la paz
para alumbrar las oscuras urbes.
Doy pesca a los barcos
y descanso a las olas,
doy plácidos anocheceres
y brillantes amaneceres.
Doy luz
a los amantes escondidos,
doy brisa que susurra
a su paso entre las palmeras.
Desde El Alaiún vengo
pasando por Tetuán,
camino sobre el mediterráneo
y cubro de arena mi camino.
y giro en espiral hacia el norte,
mediterráneo de por medio
caminando sobre las aguas.
Desde El Aaiún, pasando por Tetuán,
hasta la ciudad de València,
aire cálido de otoño,
aire que no empuja veleros,
ni provoca grandes olas.
Traigo conmigo caracolas,
fauna exótica e historia,
mar limpia y clara
donde se reflejan albatros y pescadores.
Desde El Aaiún traigo conmigo
el aroma de las especias,
frutos secos, dátiles,
confusión de los sentidos.
Camino sobre las aguas,
a mi paso enareno
paisajes, ciudades y gente,
traigo el cáliz de la paz
para alumbrar las oscuras urbes.
Doy pesca a los barcos
y descanso a las olas,
doy plácidos anocheceres
y brillantes amaneceres.
Doy luz
a los amantes escondidos,
doy brisa que susurra
a su paso entre las palmeras.
Desde El Alaiún vengo
pasando por Tetuán,
camino sobre el mediterráneo
y cubro de arena mi camino.
©GuillemSenent.
04/02/2012
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